Cómo saber si un plugin es de fiar: os explicamos que lo mejor es usar extensiones de código abierto, instalarlas desde fuentes oficiales y revisar sus permisos.
Alberto Amado, técnico en ciberseguridad que nos ha prestado sus superpoderes, nos recuerda que hay otras medidas preventivas como instalar sólo aquellas extensiones que sean estrictamente necesarias; desechar aquellas extensiones que tienen pocas descargas; no utilizar la funcionalidad de guardado de contraseñas de la que disponen los navegadores, sino un gestor de contraseñas externo; establecer un segundo factor de autenticación en aquellos casos especialmente sensibles, como nuestro banco online; y mantener actualizado siempre tanto el software como los drivers del equipo.
Pero todos nos equivocamos, y más cuando el peligro puede estar al alcance de un clic. Por eso, vamos a ver qué tipo de extensiones o plugins nos la pueden colar y qué hacer si esto sucede.
Extensiones que instalamos pensando que son buenas... y extensiones que nos llegan mediante engaño y descargamos sin ser conscientes
Por un lado, puede haber extensiones que hemos instalado por decisión propia, pensando que eran plugins buenos pero, ¡sorpresa!, lo que creías que estabas instalando en tu navegador algo para hacerte la vida más fácil, en realidad era una extensión que hace otro tipo de tarea oculta, como “minar criptomonedas, robar las contraseñas o redirigirte a páginas comprometidas”, ejemplifica Amado.
Fuentes.
Artículo: "Recomendaciones a seguir si has instalado sin querer una extensión maliciosa en tu navegador" Publicado en https://www.msn.com/ por maldita.es el 18 agosto, 2022. Consultado el 04/09/2022.
No hay comentarios:
Publicar un comentario